Todos tenemos un verano que nos cambió la vida pero hubo uno que hizo historia: 1967 en San Francisco.
En ese momento la Guerra de Vietnam estaba en pleno apogeo. Esa guerra injusta desencadenó grandes protestas sociales en Estados Unidos, especialmente entre los jóvenes que fueron reclutados. El lema “Haz el amor, no la guerra” se escuchó en todo el país y su mensaje se extendió rápidamente a otras partes del mundo, especialmente a Ibiza.
Pero volvamos a San Francisco. De las manifestaciones nació una nueva forma de vida pacifista y revolucionaria. El himno del 67 cantaba: “Si vas a San Francisco, asegúrate de llevar flores en el pelo... Si vas a San Francisco, el verano será un amor allí”. Era el verano del amor, la psicodelia, la libertad, la vida en comunidad, un underground bohemio y artístico y la lucha por los derechos civiles se estaba cocinando.
Miles de jóvenes hippies se dieron cita allí durante ese verano celebrando el nacimiento de la nueva contracultura. Surgió todo un movimiento que defendía la revolución sexual y la paz, con el rock psicodélico como banda sonora.
El verano ibicenco del amor
Con la convicción de que un mundo mejor era posible, muchos hippies viajaron a Europa y Asia en busca de lugares donde poder vivir de acuerdo a sus convicciones e ideales. Así fue como muchos de ellos descubrieron Ibiza. Con Franco en el poder, la isla seguía siendo una desconocida para los turistas. En las casas de campo los hippies encontraron el lugar perfecto para iniciar un estilo de vida comunitario y pronto fundaron mercados tan míticos como el de Punta Arabí o Las Dalias, donde se volvió a poner en valor la artesanía, las artes y otra forma de entender el mundo. Con sus coloridos vestidos y su larga melena llamaron la atención de todos los ibicencos; de hecho los lugareños los llamaban “els peluts” que significa ̈los peludos ̈. Está claro que dejaron su huella en la isla. Aún hoy podemos percibir su esencia que ha perdurado durante generaciones y forma parte de la identidad de Ibiza.Todos queremos un verano de amor
Pero el verano del amor no se quedó ahí. El verano del 69 también fue inolvidable. Ocurrió solo dos veranos después, cuando alrededor de 500.000 jóvenes se reunieron en el Festival de Woodstock. Tres días de paz y música donde personajes legendarios como Jimi Hendrix, The Grateful Dead, Creedence Clearwater Revival, Santana y The Who desfilaron por los escenarios. Nuevamente, hubo libertad y optimismo.
Puede que no sea tan conocido, pero 1988 también es considerado por muchos como otro verano de amor. Tuvo lugar en el Reino Unido, justo en el momento en que nacía el acid house y las raves comenzaban a tomar protagonismo.
Y tu, ¿Estás preparad@ para vivir el tuyo?
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